La noche del 4 de junio se realizó un simulacro en el túnel de l’Ollería, situado en la carretera A-7, en la provincia de Valencia, y que gestiona Becsa dentro del contrato de conservación del Sector V-03 perteneciente al Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible.
Este tipo de simulacros se realizan periódicamente en el túnel para evaluar y poner en práctica el Plan de Autoprotección y los protocolos de los servicios. En el simulacro participaron el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, el Consorcio de Bomberos de Valencia, la Guardia Civil de Tráfico, el Centro de Gestión de Tráfico, el Servicio de Emergencias Sanitarias y el Servicio de Emergencias 112 de la Comunidad Valenciana, además del personal de la Conservación y Explotación de Carreteras de Becsa.
El ejercicio consistió en la simulación del accidente de un vehículo «incendiado» con un herido atrapado. Tras los preparativos de inicio, el simulacro empezó con el aviso al centro de control y continuó con la participación de los diferentes intervinientes.
Después de la llegada de la Guardia Civil de Tráfico, de los bomberos y de los servicios sanitarios, se procedió a «apagar» el incendio y a la excarcelación y atención sanitaria del herido.
Gracias a este tipo de maniobras se pone a prueba la gestión de incidentes por parte de todas las entidades implicadas. El objetivo es mejorar continuamente la rapidez de respuesta y agilizar la prestación de asistencia y ayuda.